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Esperanzador inicio de temporada del novillero toledano MIGUEL ZAZO


Ficha del Festejo: Se lidiaron cuatro utreros de las ganaderías de La Solana (1º y 3º) y La Buitrera (2º y 4º) , el tercer novillo ‘Deseadito’ nº 27, fue premiado con la vuelta al ruedo. Buena entrada en los tendidos con ambiente festivo.

Llegaba el novillero toledano Miguel Zazo a la decimonónica plaza de toros de Trujillo con tan solo una novillada a sus espaldas. Sin embargo, su buen hacer y poso durante toda la tarde dejaron patentes las condiciones que el toledano lleva dentro.

Así, el novillero toledano que debutó el pasado mes de agosto en la plaza de toros de Toledo, ha iniciado la presente temporada taurina marcando diferencia.


En su primer novillo, falto de fuerzas, pero con clase al que había que llevarle muy pulsado y con temple. Zazo realizó una faena de menos a más destacando la sobriedad de su toreo, poso y naturalidad con la mano izquierda. Al final de la faena, dejó patente su valentía cuando el novillo se estaba apagando, realizando una serie por manoletinas. Con la espada se mostró muy seguro dejando una estocada en el sitio. Cortó dos orejas.

En su segundo novillo, el novillero toledano de Ventas con Peña Aguilera realizó desde la salida del mismo, una lidia ordenada en la que destacó el uso del capote en los medios del ruedo. Con este novillo, Zazo tuvo que tirar de valor debido a que las embestidas de este se quedaban cortas. La brusquedad del novillo tampoco permitió el acople total entre ambos. Sin embargo, se pudo ver a un novillero resolutivo para su poco bagaje . La faena en el tercio se fundamentó en varias tandas con la mano derecha. Así como por la quietud y cercanía que derrochó cuando el novillo ya no daba más.

En la suerte suprema, volvió a destacar la ejecución de la misma, volviendo a repetir el espadazo como en su primer novillo. Sin embargo, la frialdad del ambiente y la exigencia del palco, provocaron que solo cortara una oreja.


Por su parte, el novillero extremeño, José Rojo , el cual , actuaba en la plaza de toros de su ciudad . Se mostró firme toda la tarde, destacando su buen hacer con la mano derecha y la buena sintonía con el publico local . Así, realizó dos faenas marcadas por la cercanía de terrenos y la variedad de suertes , que junto al buen uso de la espada y el cariño de sus paisanos . Le permitieron cortar cuatro orejas y un rabo.

Al finalizar el festejo, la gente quedó satisfecha del juego realizado en su conjunto por los novillos y destacaron el gran acierto de los novilleros con las espadas. Algo difícil de destacar en estos tiempos . Donde las oportunidades escasean para todo el escalafón novilleril.

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